Riquezas ¿para qué?
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:26:29 pm
pero lo legal en la justicia de los hombres responde muchas veces a intereses, lo manifiesta el Padre Carlos Rea Maldonado, de la Parroquia San Juan.
La codicia, es el deseo desmedido por acumular y poseer bienes materiales y Jesús nos pide cuidarnos de este tipo de deseo y nuevamente propone una enseñanza.
Tener riquezas no es malo, lo malo es que éste medio se convierta en un fin y nos sintamos autosuficientes con ellas y nos olvidemos de Dios poniendo en lo material la confianza, comprando con el dinero hasta conciencias y voluntades.
La parábola de un hombre rico, que aun sigue ideando como acumular aun una mayor cantidad de bienes, piensa en derribar su granero y hacer uno aun mas grande para almacenar y despreocuparse de lo que viene, sin trabajar, dándose un gran vida.
Todo lo que Dios nos da, debe pasar ante nosotros, convirtiéndonos en un canal, para que bienes materiales sean puestos al servicio del que necesita, de lo contrario estaremos forjando nuestra condenación.
Pero este hombre terco y obstinado, no se ha dado cuenta que cuando le llegue la muerte no habrá nada que hacer contra ello y que nadie sabe para quien trabaja, como dice aquel refrán. Y que en su momento no se preocupo por hacerse rico ante Dios.
Finalmente nada debe distraernos en la búsqueda del verdadero tesoro, del tesoro al cual debemos ambicionar, que es Jesucristo.
Y ¿Cual es la valoración o lugar en que ubicamos a Jesús, en nuestro proyecto de vida?
Escucha el audio del informe de la semana:
{audio}informe_iv_viii_xiii.mp3{/audio}
