Urgentes reformas en salud y educación
Creado el Lunes, 26 de Agosto del 2013 07:23:31 pm
Los bajos sueldos que reciben los médicos en nuestro país obliga a que los egresados de nuestras universidades emigren a otros países atraídos por una mejor remuneración, lo que desnuda una cruel realidad: el Estado peruano está invirtiendo y subsidiando a los países del primer mundo la formación de profesionales médicos que se irán a atender a su población.
El déficit de médicos especialistas en nuestro país asciende a 6,398, y de los pocos que hay, el 70% se queda en Lima y el resto va a las zonas urbanas del interior. Los pacientes, conformados en su mayoría por personas de la tercera edad, abarrotan hospitales con largas colas que se inician desde las 4 de la mañana y, a su desesperación por encontrar solución a sus males, se adiciona la indignación por el mal trato que reciben y que es necesario erradicar.
El Estado solo destina el 4.5% de su PBI a este sector, en una clara contradicción que existe entre el crecimiento de su economía y la necesidad social de su población. Como referencia adicional, hay que anotar que Chile gasta en salud por cada habitante 1,172 dólares y el Perú solo 400.
En el sector educativo la realidad no es diferente: mientras se exhiben optimistas cifras de crecimiento económico que nos colocan a la vanguardia en América Latina, nos disputamos los vergonzosos últimos lugares en calidad educativa con países pobres como Haití.
La urgente demanda de la población es contar con un sistema educativo equitativo y eficiente como pilar de desarrollo, y que tal exigencia no se quede encapsulada en promesas electorales, sino que se plasme en acciones concretas. El momento económico actual amerita poner en marcha una reforma educativa integral que involucre la equidad, calidad de la educación y modernización de su infraestructura. Es necesario elevar el 3% del PBI que actualmente se destina a este sector, buscando llegar al 6% establecido en el Acuerdo Nacional como objetivo para el 2016.
Para que ocurra una real reforma en estos dos sectores, se precisa la participación comprometida del Congreso de la República. Envuelta en repartijas, negociado de comisiones y blindajes, y con un 55% que la ubica como la institución más corrupta del país, la tarea para revertir tal situación pasa por convencer a la población del cambio de actitud de sus miembros, poniendo de una vez en agenda estos temas urgidos de atención.
En nuestra región habría que preguntarnos ¿qué hacen Heriberto Benítez, Víctor Crisólogo, María Magdalena López, Fredy Otárola y Modesto Julca a favor de estas urgentes reformas?
Envueltos en ataques mutuos por corrupción, estos temas no figuran en sus agendas, por lo que se precisa que nuestra sociedad civil los obligue a ponerlos en ellas, con letras grandes y que se impulse de una vez su discusión. Las desatinadas denuncias y querellas contra periodistas independientes hechas por el presidente regional de Áncash no deben distraernos de estas urgentes demandas del país.
Hastiados de la corrupción, la impunidad, el sicariato y la violencia en nuestra región, miles de chimbotanos han salido a las calles a protestar y a emplazar a sus autoridades a poner coto a tal situación. La sociedad civil ya despertó y es necesario aprovechar esa positiva reacción. Es hora de pedirles también a nuestros congresistas que rindan cuentas de su gestión.
César Córdova Ponce
Director de la revista La Voz del Pescador
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Ilustración: elbuho.pe
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