Creado el Miércoles, 31 de Octubre del 2012 04:01:02 pm

Allí debería haber confrontación de ideas, debates sobre investigación y participación de la coyuntura política; sin embargo, eso no se da, se viene generando escándalo por la conducta tirana o mezquina de las autoridades. Pero estos hechos no solo suceden en Chimbote, también en otras ciudades donde los alumnos reclaman cambios de sus autoridades y especialmente de sus rectores que se aferran al cargo e imponen su autoridad a costa de lo que sea, yendo incluso contra el proyecto de vida de estudiantes que, con todo derecho, reclaman transparencia o fin de intentos reeleccionistas de rectores cuestionados.

Entonces, para dar solución a este problema se hace necesario modificar algunos artículos, especialmente el artículo 29º inciso b) de la Ley 23733, referido a la elección del rector. No debe ser elegido por la Asamblea Universitaria, eso genera un entorno de gollerías y amigos, concentración de poder en un reducido grupo; en consecuencia, se hace necesario universalizar el voto, es decir que todos los estudiantes de cada universidad elijan a su rector mediante voto universal y secreto, dirigido por la ONPE. Eso traerá transparencia, paz y desarrollo universitario.

De igual modo, se debe precisar expresamente la prohibición de la reelección de los rectores tanto de las universidades públicas como privadas, porque eso incentiva la corrupcion, baja de la calidad de la docencia debido a que se nombra a los amigos para perpetuarse en el poder. Esos afanes dictatoriales deben terminar y es momento de que el Congreso escuche la voz de los estudiantes y de la sociedad que reclama transparencia en las universidades públicas y privadas.

Lo que ha sucedido en la Universidad San Pedro exige que se modifique la Ley Universitaria a la brevedad posible a fin de controlar los conflictos sociales que no son buenos para nadie. En un país donde la sociedad se polariza más por culpa de sus gobernantes, no es posible permitir que la corrupcion también se acreciente en las universidades donde lo que debe primar es la extensión social, el fomento del debate académico y político como la mejor muestra de la calidad educativa. En eso poco han avanzado las universidades privadas.

Por tanto, debemos rechazar las denuncias y persecuciones a los profesores y estudiantes, así como rechazamos el intento de poder por grupos que podrían perjudicar la imagen y el prestigio de la universidad. Entonces, la solución es la reforma universitaria, donde los alumnos, sin presiones, prebendas o persecuciones, mediante el voto universal y secreto elijan a sus autoridades universitarias. Basta de autoritarismo, evitemos la violencia, aprendamos a escuchar a los alumnos. Eso falta en la USP.

Sabino Ponce Roso

Decano del Colegio de Abogados del Santa

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