Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:24:23 pm

se evidencia en el Camino de Emaús, narrado en el evangelio de Lucas: “En un fin de semana se les había escapado el único ideal que había llenado sus corazones jóvenes”.
El padre Rafael Rao Cerna, párroco de la Iglesia San Juan Apóstol y evangelista de San Juan; sintetiza el pasaje bíblico:
AUDIO 1: -“Y en el camino se encuentran con un amigo, se encuentran con otra persona extranjera. Le extraña lo que ha sucedido. Este es el único extraño que no sabe lo que ha sucedido. Lo de Jesús nazareno. Que estuvimos con él, llegamos a las manos de los sacerdotes, fue juzgado y lo crucificaron hasta que murió. Y como estaban de camino a su pueblo, ya era tarde, y Jesús hace como adelantarse; pero él le dice no, quédate con nosotros, que la tarde ya está cayendo. Y se quedaron para cenar un poco. Y la impresión grande: ¿Tiene algo de comer? Sí, panes. Agarró el pan y lo partió. Lo reconocen”.
La realidad no aleja a los creyentes de lo sucedido hace dos mil años:

AUDIO 2: -“Ese episodio va en una historia de nuestra personalidad. En cuanto uno se cree en su propia identidad; pero no cree en esa experiencia. Porque estaban desilusionado.

El hombre de fe, recuerda a los creyentes que la confianza en Dios no es exclusiva de algunos sino que compromete a todos y, que la esperanza debe mantener y acercar al hombre ante Dios.
AUDIO 3: -“Signo de la esperanza para mantener ese creer en nuestra fe fundamentada y no solo eso sino anunciarlo. Signo de la esperanza es el anuncio. Esa buena noticia: ¡Ha resucitado! Verdaderamente, hay gente que todavía es incrédula y es ahí donde podemos llegar. El que nos acepta más es la gente humilde, sencilla, el que está cerca a Dios; pero el que tiene un poco de conocimiento o un joven universitario no le importa este tipo de investigación sino explorar el mundo en que viven como que a Dios le han puesto a un lado, pero si llegamos con ese afecto, afecto verdadero de padre dijéramos: Es Cristo quién vive en mí. ”
Precisamente, al traer esta historia a la realidad actual, también, se puede observar que esa prueba de credulidad, confianza y espera; se evidencia cuando una persona de carne y hueso atraviesa por un momento difícil; pero a diferencia de los discípulos, se atreve a enfrentar la situación y creer que Dios actúa.
AUDIO 4: -“Es terrible vivir con este flagelo, porque la sociedad nos condena. Nos ve como si fuéramos la lacra como a personas con un pasado horrible; pero no es así. A mí me dio la valentía de salir y hablar. No es fácil o sea aceptar esto, pero todo es un proceso. Dios sí, Dios es la fortaleza para el ser humano, en todo sentido para mí, es el que me ha podido la fuerza para yo salir a los medios de comunicación y poder salir a conversar con los jóvenes, salir a las universidades, ha hablar con los profesionales de la salud que a veces usan esos términos tan feos: de ‘contagio’ y, nosotros no contagiamos a nadie; porque es una infección que se transmite vía sexual sin protección, por supuesto”.
María Morillo (44), Presidenta de la asociación de mujeres “Un camino de esperanza”, lleva 15 años viviendo con el VIH. Sin embargo, y pese a la discriminación del que ha sido víctima, no se rinde y comparte su historia esperando que los jóvenes prevengan la infección:
AUDIO 5-1 y 5: -“Chimbote es el quinto lugar con incidencia en VIH, entonces como la discriminación es tan fuerte; la gente se opaca y no quiere hablar del tema. Quiero enfocar este tema para los jóvenes: que ellos también abran las puertas a las personas infectadas, ¿En qué sentido? En que no se excluyan sino sean parte, no del problema sino de la solución, para que ellos aprendan y puedan vivir mejor; o sea, que ellos cojan un ejemplo, ¿no? Como el ejemplo de vida de María (la que habla)”.
María, un ejemplo de esperanza, tiene dos razones por las que no se atreve a desfallecer: Sus dos hijas y la confianza en Dios que no ha menguado y, además, sabe que cada día es una victoria ganada.
AUDIO 6: -“Yo tengo dos hijas que son la razón la razón de mi vivir y de seguir luchando por mi vida y de seguir luchando por mi vida. Yo sí he dicho: no voy a morir de esto. Esto, también implica fortaleza de Dios, decisión tuya y tener mucho coraje y salir. Yo he aprendido a vivir a partir de que me aferro a Dios, a veces busco la comunicación con él y solamente vivo en la esperanza de él. Él te da una fortaleza que, a veces, tú dices: bueno, pero yo fui, en un momento estuve muy triste, estuve deprimida y ahora veo este cambio y quién es el que me da; no soy yo, es Dios. Yo tengo 15 años viviendo con el VIH y, sin embargo no me ha podido matar hasta ahorita”.
Los discípulos anduvieron con Jesús, lo conocieron; pero duraron de su fe y perdieron la esperanza en su líder, el redentor de Israel. Hoy, María, cree y sabe que Jesús es su única opción y se ha propuesto esperar pacientemente en él.
Escucha el audio del informe de la semana:

{saudioplayer}nuestro_camino_de_emaus.mp3{/saudioplayer}

Noticias relacionadas