Informe de la semana: Marta y María - El servicio y la contemplación
Creado el Viernes, 15 de Julio del 2016 10:37:56 am
Cada día la preocupación por el trabajo, las relaciones personales y familiares y la prisa por ganarle al tiempo agita nuestro corazón y nos distrae de lo esencial en nuestra vida: Dios. De hecho, no está mal el cumplir con las responsabilidades, sino el modo en el que gastamos la vida queriendo satisfacer nuestras necesidades y prioridades del modo errado, tal como lo hacía Marta, según la descripción de San Lucas.
Jesús, aparentemente, amonesta a Marta por su preocupación casi exagerada por el orden y los requerimientos de la casa. Era la hermana mayor de María, y como tal llevaba las riendas del hogar. Ella era la jefa de casa y le correspondía atender al Señor. Pero en esa preocupación, olvida acompañar a Jesús y prestarle atención al evangelio, en tanto María estaba sentada y atenta a las enseñanzas del Maestro.
Cuando Jesús dice: "Marta, Marta, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas; sólo una es necesaria…”, le está pidiendo detenerse un momento para respirar, profundizar su fe y andar con más calma. Jesús está tratando de reconciliar la oración y la acción en estas dos hermanas de Betania, para que de este modo no descuidemos estas dos áreas en nuestra vida. Sin la contemplación, el servicio puede volverse tormentoso y la acción sin la oración carece de profundidad y pierde su esencia, esa vitalidad que viene de Dios y vuelve a él, “porque Dios siempre es primero”, reflexiona el sacerdote Giovanni Sabogal Osorio.
Evangelizar es una cualidad vital del servicio, porque se comunican las Buenas Nuevas y se anuncia a Dios como una realidad constante en la vida del hombre. Es importante abrir las puertas del hogar a la visita del Señor, pero abrir el corazón y prepararle un lugar es esencial. Pues, escuchar y servir, orar y actuar son las dimensiones que deben cohabitar en nuestra vida como testimonio de nuestra fe.
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