LA COLUMNA DEL DÍA | Áncash: los desafíos de la nueva gestión regional
Creado el Jueves, 17 de Diciembre del 2020 12:56:03 pm
La irresponsabilidad y ambición del gobernador regional Juan Carlos Morillo y su entorno han puesto en el camino un enorme desafío al vicegobernador Henry Borja. Hoy los ojos de la población estarán con la atención puesta en sus acciones. Pese a la incertidumbre y el corto tiempo, tendrá que demostrar con acciones concretas su voluntad política de cambiar la región en el tiempo que le toque manejar las riendas del Gobierno Regional de Áncash.
Por ahora la separación de la desafiante exgerenta Gina Gálvez es una buena señal; sin embargo, completar los cuadros técnicos que le posibiliten viabilizar esa voluntad anunciada no será fácil. ¿Cuántos profesionales estarán dispuestos a asumir cargos de responsabilidad en este contexto? La detención preventiva, aún no confirmada en segunda instancia, es solo de nueve meses; podría ser menos, es incierto.
Sumado a ello, la amenaza de la nueva ola de la covid-19 es otro desafío. Desde que se inició hace casi nueve meses, muy poco hizo la gestión de Morillo; muestra palpable de eso es que él mismo no se atendió en Áncash sino en Lima cuando contrajo el nuevo coronavirus. Paradójicamente, la razón por la que se encuentra preso junto a sus funcionarios es que lo poco que hizo, lo hizo mal.
Afrontar con éxito la “segunda ola” de la pandemia es, sin lugar a dudas, el principal reto y las expectativas de la población son altas. Difícilmente, después de lo vivido, la población querrá entender explicaciones; aunque puede parecer injusto, lo cierto es que pedirán resultados. Ahora, para tener éxito en esta tarea necesita tener un buen equipo de comunicación corporativa, gubernamental, no de campaña electoral o de maquillaje y manipulación, como ha sucedido hasta ahora.
Por último, el vicegobernador en este corto tiempo deberá erradicar a todos los funcionarios “somistas” que por acción u omisión han sido parte de la corrupción regional. Las opiniones en las redes requieren que lo acompañe gente nueva, jóvenes profesionales ancashinos; esa es una opinión que suscribimos muchos. Ahora bien, en esta coyuntura en que alguien que no tiene experiencia y no sabe cuánto tiempo va a estar, ¿podrá ejecutar de inmediato lo que se necesita? ¡Difícil!
Tremendo desafío el que le toca asumir al vicegobernador. Tiene en sus manos las vidas de los ancashinos; no obstante, ni siquiera tiene un día despachando y ya empezaron a “tirarle piedras”.
Hay que apoyar con ideas, pero sobre todo fiscalizando, porque como siempre digo, si al gobernante le va bien, a nosotros, el pueblo, también.
* Miguel Arista Cueva es docente y abogado. Consultor, conferencista, especialista en gestión pública, educación y derecho administrativo. Fue director regional de Educación de Áncash y del Colegio de Alto Rendimiento de Cajamarca.