CORONAVIRUS | Quejas, muertes y deudas por servicios de inhumación por covid-19
Creado el Miércoles, 27 de Mayo del 2020 07:18:48 pm | Modificado el 02/08/2024 10:51:51 am
Familiares de pacientes que fallecieron de covid-19 en el Hospital Regional “Eleazar Guzmán Barrón”, en Nuevo Chimbote, denunciaron un inadecuado entierro de los cadáveres en el cementerio de San Pedro, de propiedad de la Beneficencia Pública de Chimbote, en medio de la pandemia que, a la fecha, afectó a 2562 pobladores y arrebató la vida de 224 personas en la provincia del Santa.
Algunos pobladores manifestaron que los cuerpos son almacenados en bolsas y sepultados en fosas comunes en el camposanto ubicado en el pueblo joven San Pedro. “Los cuerpos los han traído y los tienen tirados. No están en cajas sino en bolsas, tirados ahí. Quiero ver a mi familiar, no quiero que lo metan en una fosa”, expresó una mujer en el frontis del cementerio chimbotano.
Desde el viernes pasado la Beneficencia Pública de Chimbote se encarga de la inhumación de los restos de las víctimas de la pandemia que fueron internadas en el Hospital Regional.
Hasta un día antes el servicio lo efectuaba el cementerio privado Lomas de la Paz, en Nuevo Chimbote, pero el Seguro Integral de Salud (SIS) decidió contratar los servicios de la Beneficencia porque de esa forma se reducían los gastos del sepelio.
Otras personas también se quejaron de que el Hospital Regional no les informa sobre la defunción de sus parientes y tampoco les preguntan si estos deben ser inhumados o cremados. “Ni siquiera nos dicen ‘ya murió’, no nos llaman. Vamos al hospital y nos dicen que (el cadáver) está en el cementerio”, comentó una moradora.
Mientras tanto, pobladores que habitan en las inmediaciones del cementerio de San Pedro se mostraron en desacuerdo con que los muertos de covid-19 sean enterrados en la zona por temor a contagiarse con el nuevo coronavirus. Aseguraron que el personal del camposanto se demora más de dos días en sepultar los cuerpos y algunas veces los trasladan durante las noches.
Al respecto, el presidente del Directorio de la Beneficencia Pública de Chimbote, Alberto Hurtado Chancafe, desmintió que los cadáveres sean enterrados en fosas comunes dentro de bolsas plásticas.
Explicó que, según el convenio con el Hospital Regional, a través del SIS, la entidad que preside se encarga de recoger los cuerpos en féretros y de sepultarlos en tumbas individuales preconstruidas con cemento.
Hurtado Chancafe precisó que la Beneficencia solo cumple con recibir los cadáveres del Hospital Regional y sepultarlos, suponiendo que los deudos ya han sido avisados y que existe el consentimiento de estos para el sepelio.
“La Beneficencia de Chimbote no interviene en la decisión de los deudos. Una vez que fallece la personas, por norma, el hospital debe comunicar al familiar y este debe expresar si corresponde la cremación o la inhumación. Cuando nos llaman, nosotros consideramos que se ha avisado a los deudos y ya está listo el trámite administrativo para realizar el servicio funerario”, explicó a RSD.
El funcionario aclaró que en todas las lápidas de cemento se colocan los nombres de los difuntos, a fin de que los familiares puedan ubicarlos posteriormente, ya que por un tema de bioseguridad en estos momentos no se permite el ingreso al camposanto. Además, todos los cadáveres son inscritos en un libro de registro.
Finalmente, Hurtado Chancafe anunció que contratarán a una empresa para que construya 100 tumbas individuales en la zona alta del cementerio de San Pedro para atender los sepelios durante la pandemia.
Cabe indicar que la Beneficencia cobra una tarifa de 2070 soles por todo el servicio funerario, que incluye el traslado del cadáver, la habilitación del ataúd y la sepultura. Esta tarea la realizan los trabajadores de la entidad provistos de los implementos de seguridad necesarios, aseguró Hurtado Chancafe.
El SIS transfirió este mes a la región Áncash la suma de 97.500 soles para financiar los gastos de sepelio (inhumación o cremación) de los asegurados que fallezcan a causa del covid-19, ya sea por diagnóstico confirmado o sospecha, al amparo del Decreto de Urgencia N° 039-2020.
En el caso de la inhumación, la cobertura abarca los gastos del ataúd, traslado del féretro al cementerio y la sepultura, que puede ser en tierra o nicho. Para los casos de cremación, la cobertura comprende el ataúd, traslado del féretro al crematorio, cremación y urna.
“LA SALUD INDIVIDUAL PASA A UN SEGUNDO PLANO”
Tras las quejas de los familiares de las víctimas mortales de covid-19, el director del Hospital Regional, Edgar Caballero Cano, informó que se ha conformado un equipo de profesionales, entre ellos dos psiquiatras, que se encarga de comunicar sobre el estado de salud de los pacientes y de brindar el soporte psicológico que necesitan las personas cuando mueren sus seres queridos.
Respecto al derecho que tienen las personas de enterrar o incinerar a los fallecidos por covid-19, el médico señaló que en tiempos de pandemia es complicado avisar a los familiares, ya que el Estado ha dispuesto que se minimicen los riesgos de contaminación en la población.
“No estamos en una situación común y, por salud pública, el Estado protege a la población enterrando o incinerando en el plazo más inmediato… No se trata de lo que yo quiero, sino de lo que el Estado te puede otorgar, y en este momento lo que te puede otorgar es que tu familiar esté enterrado y que no signifique un riesgo para la salud de tu familia y de la población en general. Ahora no se puede entregar los cadáveres para que se velen”, detalló a RSD.
El funcionario dijo que el Seguro Integral de Salud tomó la decisión de inhumar los cuerpos en el cementerio de San Pedro para reducir los costos, ya que la inhumación en el camposanto Lomas de la Paz demanda un desembolso de 3000 soles, es decir, 930 soles más que la Beneficencia. Y el servicio de cremación se cotiza en 2500 soles.
“No es decisión mía. El mismo SIS central ve que es extremadamente oneroso gastar más de 4500 soles en inhumación o incineración, porque hay que pagar la incineración y también el servicio funerario. En Chimbote hay una sola incineradora y no tiene la capacidad para la cantidad de fallecidos que tenemos a diario en todos los hospitales de EsSalud y el Minsa”, refirió el médico.
Caballero Cano dio estas declaraciones desde las instalaciones del SIS Central, en Lima, donde gestiona el pago de las deudas que el Hospital Regional mantiene con sus proveedores, entre ellos el camposanto privado Lomas de la Paz, ya que a la fecha solo han pagado 30 de las 170 defunciones registradas en el nosocomio sureño.
Además, el jefe del Regional negó que se haya cancelado el convenio con la empresa privada Lomas de la Paz.
“CADÁVER NO PUEDE ESTAR MÁS DE DOS HORAS EN HOSPITAL”
Por su parte, el titular de la Dirección Regional de Salud de Áncash, Luis Huamaní Palomino, remarcó que la primera opción es incinerar los cadáveres y que el SIS se ha comprometido a financiar el 100% de dicho servicio en las ciudades del país que tengan crematorios, por lo que –a su juicio– no tendría que haber problemas.
“Algunos se quejan por el financiamiento, pero ese tema está resuelto porque el SIS se encarga de ello. Un cadáver no puede estar más de dos horas en un hospital; si se demoran más de 6 o 12 horas, corresponde cremarlo y entregarlo en una urna a los familiares”, sostuvo.
Según la Sala Situacional del Ministerio de Salud, a la fecha, en Áncash, se reportan 3196 casos de coronavirus y 255 personas han muerto a causa de la pandemia. No obstante, el puerto de Chimbote registra 1502 afectados por el covid-19 y 158 defunciones, según la Diresa.
CEMENTERIO LOMAS DE LA PAZ ESPERA PAGOS
Desde que empezó el estado de emergencia, hasta el domingo pasado Lomas de la Paz ha sepultado 90 cadáveres e inhumado una cantidad similar. Se trata de víctimas de la pandemia procedentes de todos los hospitales y redes de salud de la provincia del Santa.
Ante la nueva decisión del Seguro Integral de Salud, el dueño del cementerio Lomas de la Paz, Arturo Torres Calderón, señaló que no les han comunicado que ya no requerirán los servicios de inhumación, pero se han enterado que ahora la Beneficencia de Chimbote se encarga de esa labor.
El empresario aseguró que nunca le han cerrado las puertas al Hospital Regional y han seguido brindando sus servicios por ser un caso de emergencia, a pesar de que la institución les adeuda al menos 250.000 soles.
Torres sostuvo que no han colapsado y que aún siguen prestando los servicios de cremaciones al Hospital Regional, EsSalud y a las Redes de Salud Pacífico Norte y Sur. (L.U. - RSD Noticias).
Foto principal: Paul Meza (Cortesía).