Creado el Domingo, 12 de Abril del 2020 01:56:54 pm

La cuarentena permite descubrir paisajes que quizá los chimbotanos ignoraban y apreciar cómo las aves viven con tranquilidad

Un recorrido por la margen derecha del río Lacramarca nos permite apreciar un hermoso espectáculo de la naturaleza: una laguna que subsiste  en medio de la vegetación y de las fábricas pesqueras. La belleza del paraje, producto de las filtraciones de agua, se ha convertido en el hogar de peces y cientos de aves que la han adoptado como zona de descanso.

La laguna está escondida a pocos metros de la Carretera Panamericana Norte y, gracias a la cuarentena obligatoria del hombre por la pandemia de Covid-19, hoy descansa tranquila sin perturbación alguna que la dañe.

RSD recorrió durante una hora ese tramo del río Lacramarca y pudo observar cómo la flora y fauna conviven de manera perfecta a escasos metros de la zona urbana. Un paseo por ese lugar de Chimbote permite una reflexión oportuna sobre cómo debería ser nuestra relación con los ecosistemas que nos rodean.

MILES DE AVES
Luego de una caminata se puede llegar hasta la desembocadura del río para ver el espectáculo de miles de aves de distintas especies que descansan plácidamente o pugnan por conseguir alimento. 

Pelícanos, cormoranes, zarcillos, gaviotines reales y gaviotas peruanas disfrutan de la tranquilidad del mar cuando el hombre está confinado en casa para evitar el contagio con el nuevo coronavirus.

Mientras un grupo de aves prefiere bañarse en el mar, otras miles sobrevuelan la bahía de Chimbote y rodean a las embarcaciones ancladas por la paralización de las actividades pesqueras.

Cuando pase  el aislamiento social obligatorio, ¿los hombres tendrán acaso otra forma de ver la vida y su relación con la naturaleza? (EA - RSD Noticias). 

Fotos: Edwin Azaña / Paul Meza

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