Áncash: indagan caso de niña que fue sacada de sala de operaciones por falta de insumo
Creado el Lunes, 19 de Agosto del 2024 03:58:55 pm | Modificado el 20/08/2024 08:41:01 am
Un ciudadano denunció que su hija de 10 años, con síndrome de Down, fue retirada de la sala de operaciones del Hospital Regional Eleazar Guzmán Barrón, de Nuevo Chimbote, en plena intervención quirúrgica, por falta de insumos médicos.
Linderman Valdez Centeno detalló que, el 12 de agosto, cuando su hija estaba anestesiada y en medio de la operación en la que se le extirparía la vesícula por presencia de cálculos, los médicos suspendieron la intervención quirúrgica debido a la falta de gas laparoscópico.
Valdez Centeno señaló que la menor tuvo que ser ingresada a la sala de recuperación con dos cortes en el abdomen, pero sin haber sido extraída la vesícula con los cálculos. El padre se mostró indignado y aunque le ofrecieron reprogramar la cirugía, dijo que no aceptó.
HOSPITAL RESPONDE
El subdirector del Hospital Regional, Marcelo Napan Briones, dijo a RSD que la intervención quirúrgica electiva se realizó tras verificar que se contaba con todo lo necesario; sin embargo, durante el procedimiento ocurrió un hecho fortuito.
El profesional detalló que como la familia había optado por una cirugía mediante la modalidad de laparoscopía, tras realizar dos incisiones y previo a introducir los trócares (una especie de tubos), para insuflar (introducir) con gas CO2 la cavidad abdominal de la paciente, el sensor de la torre laparoscópica mostró una señal de alerta como si estuviera muy baja la reserva de gas o este se hubiera terminado.
Indicó que, frente a esa situación, se planteó a la familia continuar con la operación, pero ya de modo convencional (con corte normal), pero no estuvieron de acuerdo. Agregó que, al día siguiente, cuando el padre de la niña se acercó a su despacho para quejarse por el hecho, se le planteó reprogramar la cirugía mediante laparoscopía para el sábado 17 de agosto, pero tampoco accedió.
Aunque el hospital aún indaga el caso, el médico comentó que no había forma de saber cuánto gas quedaba, porque ese tipo de balones no tienen un medidor que lo muestre.
“No hay una herramienta para medir la cantidad exacta de gas que hay para garantizar si se podía continuar con la cirugía. Si se continúa y se acababa la reserva hubiera sido peligroso, porque la cavidad pudo haberse dañado por las pinzas”, explicó el subdirector. (M.E. – RSD Noticias).