LA COLUMNA DEL DÍA | Cinismo y doble rasero
Creado el Domingo, 28 de Abril del 2024 11:25:30 pm
El cinismo es la desvergüenza en la mentira o en la defensa y/o práctica de conductas o doctrinas reprochables con una obscenidad descarada.
El doble rasero es el diferente modo de juzgar a personas o grupos de personas, por el cual unos reciben un mayor castigo o reprobación que otros por los mismos hechos.
Tanto el cinismo como el doble rasero se han vuelto un comportamiento común en aquellos que tienen interés en la cosa pública, en todos los ámbitos del poder, sea nacional, regional y también a nivel local.
El político cínico es aquél que sin vergüenza alguna quiere negar que los trabajadores de su despacho congresal recaudan firmas para un movimiento regional ancashino y toda la actividad la realizan en horarios de oficina y utilizando recursos públicos. Es tanto el cinismo del congresista Darwin Espinoza, que un amplio y detallado reportaje televisivo no fue suficiente para qué, por lo menos exhiba un poco de encogimiento, por el contrario, salió afanoso como siempre a acusar a sus “enemigos” de estar ejecutando una nueva patraña en su contra.
Como parte del entuerto y en el colmo del cinismo, Espinoza negó tener una “amiga especial” trabajando en el despacho de la congresista Alcarraz como resultado de un presunto y cuestionable intercambio de favores. El tema se zanjó con una carta pública de la esposa de Espinoza, comunicando el fin de su relación conyugal y con la congresista Alcarraz diciendo con alta dosis de cinismo “yo no pregunto a quien te levantas” y luego despidió a la amiga especial del susodicho congresista.
Espinoza no es el único, sino recordemos el caso Rolex y la conducta cínica de Dina Boluarte que fue tan descomunal y desvergonzada como el congresista chimbotano y solo por señalar un hecho reciente. Es evidente que el cinismo está íntimamente relacionado a una pérdida del sentido de la realidad y se cae en el absurdo de creer que, diciendo cualquier cosa, bastará para justificar lo injustificable.
El doble rasero también nos acaba de dejar un triste ejemplo, hasta antes de que estalle el caso Rolex, se conoció que la Fiscalía requirió el teléfono móvil del influyente Gustavo Gorriti por una denuncia que lo acusa de ser el poder en la sombra en el Ministerio Público. Gorriti no entregó nada y le ampliaron el plazo para que envíe su teléfono móvil y hasta la fecha no habría entregado nada. El conocido periodista Juan Carlos Tafur fue allanado en su vivienda por orden de la fiscal Marita Barreto, por algo muy similar al caso de Gorriti, el mismo hecho con diferente tratamiento.
En el caso de Gorriti es evidente que tiene muchos amigos en la Fiscalía, en especial en los mal llamados equipos especiales, Tafur por el contrario estaba criticando a la fiscal Barreto en su medio de comunicación. El diferente tratamiento de hechos similares hace recordar la frase repetida por los dictadores Benavides y Odría, “para mis amigos todo, para mis enemigos la ley”.
Hace rato que la Fiscalía y el Poder Judicial actúan con un descarado doble rasero y han contribuido con sus polémicas decisiones a debilitar la institucionalidad en nuestro Perú y los equipos especiales solo han servido para hacer de esta mala praxis una línea de conducta en su accionar fiscal.
* Pablo Rioja Cueva es abogado especialista en derecho constitucional y administrativo, árbitro en contrataciones con el Estado y laboral. Tiene amplia experiencia en gestión pública y docencia universitaria. Fue regidor en la Municipalidad Provincial del Santa.