La Palabra del día 14 de octubre del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:28:27 pm
que pagáis el diezmo de la hierbabuena,de la ruda y de toda clase de legumbres, mientras pasáis por alto el derecho y el amor de Dios! Esto habría que practicar, sin descuidar aquello. ¡Ay de vosotros, fariseos, que os encantan los asientos de honor en las sinagogas y las reverencias por la calle! ¡Ay de vosotros, que sois como tumbas sin señal, que la gente pisa sin saberlo! Un maestro de la Ley intervino y le dijo: Maestro, diciendo eso nos ofendes también a nosotros. Jesús replicó: ¡Ay de vosotros también, maestros de la Ley que abrumáis a la gente con cargas insoportables, mientras vosotros no las tocáis ni con un dedo!Reflexión. Jesús entre sus interlocutores tuvo acogida, pero también experimentó el rechazo.
1. Fariseos y maestros de la ley. Muchos de estos le rechazaron, aunque algunos también se hicieron sus discípulos. En el caso de nuestro texto, un fariseo lo había invitado a su casa a comer. Al reproche de no lavarse las manos antes de la comida, Jesús dirige estas palabras contra los fariseos y maestros de la ley.
2. Hipocresía. Jesús critica la hipocresía de estas personas. Son minuciosos en observar preceptos insignificantes, pero se les pasa lo esencial que es la justicia y el amor. Además, les gusta el reconocimiento público y ser importantes; aparentan externamente lo que no son por dentro; son exigentes con los demás y laxos consigo mismos.
- Evaluemos nuestro interior y veamos qué de fariseo llevamos dentro. Señor, ayúdanos a ser auténticos discípulos tuyos. Ten un feliz día.
Romanos 2,1-11. Tú, el que seas, que te eriges en juez, no tienes disculpa; al dar sentencia contra el otro te condenas tú mismo, porque tú, el juez, te portas igual. Todos admitimos que Dios condena con derecho a los que obran mal, a los que obran de esa manera. Y tú, que juzgas a los que hacen eso, mientras tú haces lo mismo, ¿te figuras que vas a escapar de la sentencia de Dios? ¿O es que desprecias el tesoro de su bondad, tolerancia y paciencia, al no reconocer que esa bondad es para empujarte a la conversión? Con la dureza de tu corazón impenitente te estás almacenando castigos para el día del castigo, cuando se revelará el justo juicio de Dios, pagando a cada uno según sus obras. A los que han perseverado en hacer el bien, porque buscaban contemplar su gloria y superar la muerte, les dará vida eterna; a los porfiados que se rebelan contra la verdad y se rinden a la injusticia, les dará un castigo implacable. Pena y angustia tocarán a todo malhechor, primero al judío, pero también al griego; en cambio, gloria, honor y paz a todo el que obre el bien, primero al judío, pero también al griego; porque Dios no tiene favoristismos.
Salmo 61. Tú, Señor, pagas a cada uno según sus obras. Sólo en Dios descansa mi alma, porque de él viene mi salvación; sólo él es mi roca y mi salvación, mi alcázar: no vacilaré. R. Descansa sólo en Dios, alma mía, porque él es mi esperanza; sólo él es mi roca y mi salvación, mi alcázar: no vacilaré. R. Pueblo suyo, confiad en él, desahogad ante él vuestro corazón, que Dios es nuestro refugio. R.
Fray Luis Galindo,O.P.