Creado el Martes, 29 de Marzo del 2011 12:21:30 am

Vargas Llosa, nacido en la ciudad sureña de Arequipa, el 28 de marzo de 1939, ha llegado a los 75 años convertido en un "clásico vivo" de la literatura hispanoamericana y en un icono de la cultura del Perú que reconoce su grandeza.

Esto ha llegado hasta el punto en que, sumándose a los múltiples galardones y homenajes académicos, gubernamentales, sociales y hasta deportivos, cuenta desde hoy con un plato de la variada gastronomía peruana que lleva su nombre.

Se tratará de "Los huevos de Don Mario al jugo", un plato que fue propuesto por el propio Vargas Llosa en una entrevista que concedió el último domingo a la emisora Radio Programas del Perú (RPP).

Este "manjar", según la propia definición del premio Nobel, está compuesto de unos huevos sobre pan campesino con salsa de lomito saltado.

"Querido Mario, no me he olvidado. En el próximo menú de Tanta estará tu creación", anunció hoy el reconocido chef peruano Gastón Acurio en su cuenta de la red social Facebook.

Pero su cumpleaños también ha servido para ratificar que ya es "un clásico vivo" de las letras hispanoamericanas, al recibir el homenaje de veinticuatro escritores y estudiosos latinoamericanos, que publicaron textos inéditos en la revista cultural española "Turia".

Coordinada por el también escritor peruano Fernando Iwasaki, la publicación invita a redescubrir en "sus infinitos matices" la obra literaria y ensayística del escritor en el día de su natalicio.

Entre los participantes en la cita literaria figuran autores mayores como Javier Cercas (España), Jorge Volpi (México), Rodrigo Fresán (Argentina), Alberto Fuguet (Chile), Iván Thays (Perú), Juan Carlos Méndez Guédez (Venezuela) y Edmundo Paz Soldán (Bolivia).

Además, Juan Gabriel Vásquez (Colombia), Eduardo Halfon (Guatemala), Carlos Cortes (Costa Rica) o Mayra Santos-Febres (Puerto Rico).

Mario Vargas Llosa ha logrado llevar una vida dedicada a demostrar que "la literatura es fuego", tal como afirmó en el ahora ya lejano discurso de recepción del primer premio importante que recibió en su carrera: el Rómulo Gallegos de 1967.

Un intenso periplo vital que mantiene vigente y con todos los sentidos alerta, ya que actualmente trabaja en un ensayo sobre política e incluso se da tiempo para actuar en la obra "Las mil noches y una noche".

Hace unos días, al comentar su inminente cumpleaños, el premio Nobel aseguró que está "demasiado ocupado con la vida como para pensar en la muerte".

"Creo que es importante pensar que gracias a la muerte la vida es interesante, la vida es rica, intensa y tiene cosas hermosas", remarcó para luego acotar que "lo importante para el ser humano es no morirse en vida".

Quizá, por eso mismo, tampoco se mantiene ajeno a la vida política en su país, ya que aunque prometió no intervenir directamente en la campaña para las elecciones peruanas del próximo 10 de abril, no ha evitado comentar que ha sido espectador de un "torneo de payasadas" y "muy poca lucha ideológica".

Sin embargo, ha ratificado que solo intervendrá de manera activa en el proceso electoral si en una eventual segunda vuelta se presenta una amenaza a la democracia.

Ahora, según el mismo ha afirmado, espera que paulatinamente se aquiete la marea de su consagración con el Nobel para retomar aquella disciplinada rutina literaria que le permitió forjar obras tan notables como "La ciudad y los perros", "Conversación en la Catedral" o "La fiesta del Chivo". (Cables).

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