LA COLUMNA DEL DÍA | LA ENVIDIA
Creado el Jueves, 27 de Julio del 2023 01:01:01 am
El fascismo y el comunismo desactivaron el quinto mandamiento: no matar. Ellos reclamaron el permiso para matar a gran escala por el bien de la raza o de la clase. Se puede añadir la experiencia actual del fanatismo religioso en varios países, que se atribuye la autoridad de matar a los que no son de su fe.
Sin embargo, la norma ética contra la envidia es la más importante de todas las civilizaciones porque previene la violencia. Los ejemplos en la sociedad actual ya no son Buda, Cristo, Confucio, Sócrates, Gandhi, Nelson Mandela etc. sino los multimillonarios cuyos nombres se publica con frecuencia. Los ideales de bien y de servicio han sido cambiado por la cultura de la competencia que abre la puerta a la envidia de la prosperidad de los otros.
Luc Ferry considera que en el mundo actual igualitario del sistema democrático sobresale la pasión de la envidia, más que la ira o el miedo. La amenaza en la democracia es la envidia. Cuanta más democracia más envidia y celos. La envidia es el deseo para algo del otro, sea material, intelectual o relacionado más profundamente con u felicidad. La envidia no se limita a un hecho, es una actitud permanente de descontento o insatisfacción, que elimina la posibilidad de amar o de agradecer. En lugar de ser él mismo, el individuo se compara siempre con los demás y puede llegar a la mentira o a la violencia para hacer daño al otro. En la sociedad de competencia la envidia puede impedir objetivos que la sociedad ha marcado. La envidia implica un rival y un bien, valorados como importantes; la persona envidiosa sufre porque su rival posee cosas buenas y ella no. La envidia genera tensión y puede impedir objetivos que la sociedad ha marcado en la sociedad y Dante Alighieri colocaba a los envidiosos en el purgatorio. Su castigo consiste en tener los ojos cosidos.
Sin embargo, la norma ética contra la envidia, según Sloterdijk, es la más importante de todas las civilizaciones porque previene la violencia. La regla de no envidiar se ha cambiado por la regla: debes desear lo que tienen los demás y si no lo puedes conseguir legalmente debes robarlo.
Reanimamos los conflictos ligados a la envidia para crear el clima de la sociedad de consumo que ha perdido toda referencia a la moral: periodistas, políticos (sobre todo dentro de los partidos), intelectuales, cantantes, comediantes, profesores universitarios, comerciantes etc. Se destetan entre profesionales por las diferencias de éxito a pesar de que todos parten de la misma base. Las rivalidades crecen con los que están en la misma profesión. Se inventan todo tipo de explicaciones, las más falsas, para justificar su fracaso frente al otro.
*Padre Johan Leuridan, OP, doctor en Teología en la Universidad Urbaniana (Vaticano), personalidad meritoria de la Cultura del Ministerio de la Cultura, miembro honorario de la Academia de la Lengua, doctor honoris causa de la Universidad de San Marcos y autor del libro "El Sentido de las Dimensiones éticas de la Vida".