LA COLUMNA DEL DÍA | El permanente acecho de los halcones
Creado el Sábado, 9 de Noviembre del 2024 04:00:02 pm
Luego de un tenso periodo de relativa calma en febrero de 2022, en pleno siglo XXI, se movieron las agujas de la geopolítica global, sonaron los tambores y se dio inicio a una abierta guerra convencional entre Rusia y Ucrania, que en más de 2 años y 9 meses después dan como resultado cifras escalofriantes: 280 000 soldados muertos y 800 000 heridos de ambos bandos. Y, por ahora, no hay negociaciones avanzadas, acuerdo, ni fecha que ponga fin a la guerra.
De igual manera, hace más de un año y un mes, el 7 de octubre de 2023, entre Israel y Palestina se volvieron a gatillar las ametralladoras, a encender las mechas de las bombas, tanquetas y misiles, y a matar seres humanos a sangre y fuego. Inicialmente fue un condenable ataque terrorista del grupo Hamas, que asesinaron a 1200 israelíes y se llevaron a 251 rehenes. Pero, luego, contraviniendo todos los acuerdos y tratados internacionales, el ejército israelí llevó a cabo un criminal holocausto en la Franja de Gaza, donde han asesinado a cerca de 42 000 palestinos, siendo la mayoría niños, mujeres y ancianos.
Sin embargo, en los últimos meses, el conflicto en el Oriente Medio sigue escalando, porque los aliados árabes de Palestina, como Irán, han ingresado a escena. Según los expertos, Irán (con 90 millones de habitantes y un mayor poder militar) al tomar parte directa del conflicto pone la situación en alerta roja. El 1 de octubre, Irán lanzó 180 misiles balísticos que vulneraron la cúpula de hierro e impactaron a objetivos israelís. Por su parte, Israel respondió el 25 de octubre con un potente ataque aéreo con aviones de guerra y misiles, generando cuantiosos daños a Irán. En tanto, en los próximos días líderes iraníes han anunciado un ataque demoledor.
El ingreso directo de Irán al conflicto con Israel no es un hecho menor, ya que Irán no solo cuenta con su propio poderío militar, sino que al mismo tiempo cuenta con el apoyo de Rusia, China y Corea del Norte, lo que sin lugar a dudas pone en abierta visibilidad no solo el conflicto árabe israelí, sino que visibiliza el recrudecimiento de la guerra fría entre EE. UU. y Rusia, y EE. UU. y China, donde China no expresa su abierta confrontación con EE. UU. porque ha priorizado su estrategia de dominio económico y comercial global a través de la nueva ruta de la seda, con negocios e inversiones por todo el mundo, como el puerto de Chancay en Perú.
Como vemos, junto a las múltiples crisis a nivel social, político, económico y climático en el ámbito global y nacional, las manifestaciones de la nueva guerra fría y los tambores de guerra en Oriente Medio hacen que vuelvan a revolotear los halcones de la guerra, no solo para comercializar aviones, misiles, ametralladoras y materiales de guerra, un negocio altamente rentable, sino fundamentalmente los halcones del siglo XXI, que buscan por todos los medios —diplomáticos, comerciales y por las armas— tener acceso y controlar los recursos estratégicos como el petróleo, litio y cobre y otros minerales para ampliar su poder económico, político y militar.
Los halcones de las guerras, que se creen los gendarmes del mundo, vuelven a merodear y buscan avivar conflictos, para negociar tras bambalinas sus mezquinos intereses. Los seres humanos no necesitamos guerras o conflictos amañados. Los seres humanos, en cualquier parte del mundo, queremos vivir en paz, pero con dignidad.
* Gabriel Mejía Duclós es ingeniero agrícola con especialización en ingeniería de recursos agua y tierra, 25 años de experiencia en gerencia y dirección de instituciones públicas y privadas vinculadas al desarrollo social, económico y gestión ambiental, ex candidato a la Gobernación Regional de Áncash.
Foto: Nueva Sociedad