LA COLUMNA DEL DÍA | Agenda inclusiva en el año del Bicentenario
Creado el Martes, 5 de Enero del 2021 09:37:15 am | Modificado el 06/10/2021 01:37:04 pm

Terminamos los últimos días de diciembre, con una serie de indicadores que ponen en evidencia los malos resultados del Perú en la gestión de la emergencia sanitaria y la crisis social y política, que cierra el 2020 con un cantado rebrote del covid-19, una fuerte caída del PBI en 12 %, con pérdidas de 2 millones de empleos, el incremento de la pobreza del 20 al 30 %, una educación de baja calidad, el conflicto entre los trabajadores agrarios y las empresas agroexportadoras y el retroceso en los indicadores de desnutrición y anemia.
Esta situación sumamente crítica, aunada a un proceso electoral en marcha, hace presagiar un año con alta conflictividad social, por las demandas acumuladas en las últimas décadas, generado por un modelo económico de libre mercado, que permitió la mejora de varios indicadores y el crecimiento de la macroeconomía; pero que se fue agotando al no producirse reformas sociales, económicas y políticas, que afronten con realismo las brechas de inequidad y pobreza.
En este mar de incertidumbres, y en medio del proceso electoral y de la crisis, abrigo la esperanza que las personalidades más connotadas del país: representantes de las universidades más prestigiosas, intelectuales reconocidos, las iglesias, lideresas y líderes comunitarios con trayectoria, reunidos en el acuerdo nacional, con motivo del Bicentenario, se pueda acordar una agenda nacional, que nos permita reflexionar con seriedad en todos los niveles, a donde queremos llevar a nuestros país y a sus regiones.
Estas jornadas de reflexión nacional por el Bicentenario, con agendas previamente consensuadas, y con plena participación de las entidades públicas, privadas y la sociedad civil; debe llevarnos a nivel nacional, regional y local a una serie de acuerdos vinculantes, que movilicen a todos los ciudadanos, de todas las edades y de todas las creencias, a tener agendas y prioridades actuales, que repiensen, oxigenen, e impulsen una nueva etapa de desarrollo integral, sostenible e inclusivo.
El desarrollo unilateral con recetas impuestas de acuerdo a los intereses de los grupos de poder, ya no funcionan. Se han agotado o están en proceso de agotamiento. El Perú entero, sus regiones y localidades, necesitan nuevos acuerdos, nuevos liderazgos propositivos y nuevas reglas de convivencia democrática y civilizada. La corrupción generalizada, la mediocridad, la incompetencia y la imposición de agendas interesadas a espaldas de los ciudadanos y ciudadanas ya no funcionan.
En el año del Bicentenario, ya no necesitamos maquillajes, y no debemos tolerar mentiras y medias verdades. El Perú de todas las sangres, el Perú de los barrios, de las comunidades, de los emprendedores, de los empresarios progresistas y honestos. El Perú de todos y todas, necesita ingresar a una nueva etapa. Una etapa, donde la revolución educativa derrote a la pobreza, donde la participación informada de los ciudadanos ponga en jaque a la corrupción e incompetencia, y donde los nuevos liderazgos de hombres, mujeres y jóvenes reconstruyan este país milenario que está llamado en un futuro cercano a liderar como en el Incanato el desarrollo de América Latina.
* Gabriel Mejía Duclós es ingeniero agrícola con especialización en ingeniería de recursos agua y tierra, 25 años de experiencia en gerencia y dirección de instituciones públicas y privadas vinculadas al desarrollo social, económico y gestión ambiental, ex candidato a la Gobernación Regional de Áncash.