Creado el Viernes, 13 de Abril del 2012 03:15:17 am

Delincuentes o parejas ‘faltosas’ hacen sus “hazañas” creyendo estar lejos de las miradas de la población.

Creen que nadie los mira, pero se equivocan. Los ojos digitales de Chimbote son ahora las cámaras de vigilancia de Seguridad Ciudadana. Los equipos instalados a lo largo de la Plaza de Armas han logrado descubrir decenas de estos casos e incluso han ayudado a los serenos a intervenir bandas delictivas y a reducir la delincuencia.

Precisamente a través de estos “ojos”, los agentes custodian una de las zonas más congestionadas del caso urbano de Chimbote: la avenida José Gálvez. Allí los delincuentes se pegan a sus víctimas y con sus “hábiles” manos se hacen de sus pertenencias, incluso sin que se den cuenta.

A través de las cámaras también se ha logrado imponer el orden. Y es que en las noches, grupos de pandillas se lían a golpes sin importarles que sus enfrentamientos tengan como escenario la pista.

Pero las intervenciones no solo se han limitado a combatir la delincuencia, sino también a personas inescrupulosas que, sin la menor desfachatez, han llegado a usar la Plaza de Armas como hotel.

Las cámaras han captado a cariñosas parejas que no han dudado en demostrar su amor en plena calle. Las historias de las noches de Chimbote han dejado de ser secretas. Los testigos ya no están cerca, sino en lo alto listos para captar en imágenes lo que el ojo humano no puede ver. (Sistema informativo RSD).

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