¡Señor, sálvanos, que perecemos!
Creado el Martes, 28 de Junio del 2016 12:20:21 pm
Mateo 8:23-27
23Subió a la barca y sus discípulos le siguieron.24De pronto se levantó en el mar una tempestad tan grande que la barca quedaba tapada por las olas; pero él estaba dormido.25Acercándose ellos le despertaron diciendo: «¡Señor, sálvanos, que perecemos!»26Díceles: «¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?» Entonces se levantó, increpó a los vientos y al mar, y sobrevino una gran bonanza.27Y aquellos hombres, maravillados, decían: «¿Quién es éste, que hasta los vientos y el mar le obedecen?»