Sabías que?
Creado el Miércoles, 14 de Septiembre del 2016 02:26:19 am
EXHORTACIÓN APOSTÓLICA POSTSINODAL
AMORIS LÆTITIA DEL SANTO PADRE FRANCISCO
157. Sin embargo, el rechazo de las desviaciones de la sexualidad y del erotismo nunca debería llevarnos a su desprecio ni a su descuido. El ideal del matrimonio no puede configurarse sólo como una donación generosa y sacrificada, donde cada uno renuncia a toda necesidad personal y sólo se preocupa por hacer el bien al otro sin satisfacción alguna. Recordemos que un verdadero amor sabe también recibir del otro, es capaz de aceptarse vulnerable y necesitado, no renuncia a acoger con sincera y feliz gratitud las expresiones corpóreas del amor en la caricia, el abrazo, el beso y la unión sexual. Benedicto XVI era claro al respecto: « Si el hombre pretendiera ser sólo espíritu y quisiera rechazar la carne como si fuera una herencia meramente animal, espíritu y cuer- po perderían su dignidad ».163 Por esta razón, « el hombre tampoco puede vivir exclusivamente del amor oblativo, descendente. No puede dar únicamente y siempre, también debe recibir. Quien quiere dar amor, debe a su vez recibirlo como don ».164 Esto supone, de todos modos, recordar que el equilibrio humano es frágil, que siempre permanece algo que se resiste a ser humanizado y que en cualquier momento puede desbocarse de nuevo, recuperando sus tendencias más primitivas y egoístas.