La Palabra del día 19 de marzo del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:27:58 pm
pues el Padre ama al Hijo y le muestra todo lo que él hace, y le mostrará obras mayores que ésta, para vuestro asombro. Lo mismo que el Padre resucita a los muertos y les da vida, así también el Hijo da vida a los que quiere. Porque el Padre no juzga a nadie, sino que ha confiado al Hijo el juicio de todos, para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo no honra al Padre que lo envió. Os lo aseguro: Quien escucha mi palabra y cree al que me envió posee la vida eterna y no se le llamará a juicio, porque ha pasado ya de la muerte a la vida. Os aseguro que llega la hora, y ya está aquí, en que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios, y los que hayan oído vivirán. Porque, igual que el Padre dispone de la vida, así ha dado también al Hijo el disponer de la vida. Y le ha dado potestad de juzgar, porque es el Hijo del hombre. No os sorprenda, porque viene la hora en que los que están en el sepulcro oirán su voz: los que hayan hecho el bien saldrán a una resurrección de vida; los que hayan hecho el mal, a una resurrección de juicio. Yo no puedo hacer nada por mí mismo; según le oigo, juzgo, y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.REFLEXIÓN.
En el texto anterior Jesús sana a una persona que lleva esperando 38 años su salud. Hoy, se sigue mostrando las consecuencias de esa acción benéfica para Jesús, se le acusa de quebrantar la Ley, pero él aprovecha la ocasión para seguir revelando su misión.
1. Curar en sábado. El Señor justifica su acción enseñando que su Padre trabaja siempre, puesto que no deja un solo instante de sostener en la existencia a toda la creación y en especial a cada ser humano. Si Dios dejara un segundo de obrar, automáticamente desapareceríamos de la existencia. Jesús es el Hijo de Dios, por tanto, puede obrar el bien y de modo especial en sábado, porque éste estaba reservado para el máximo bien, que era dedicarlo a la alabanza y la acción de gracias al Creador.
2. Jesús da vida. Dios es el autor de toda vida, y lo es por medio de su Palabra, lo dice san Juan en su c. 1. Los siete signos que el Señor realiza en este evangelio, son para promover la calidad de la vida y la dignidad humana, pensemos con esta clave: la conversión del agua en vino, la curación del hijo del centurión, la curación del paralítico, la multiplicación de los panes, el camino sobre las aguas, la obtención de vista del ciego de nacimiento y la resurrección de Lázaro.
- Hoy es un día para agradecer a Jesús por nuestra existencia y por nuestra fe que es el medio a través de la cual recibimos la vida plena. Ten un feliz día.
ISAÍAS 49,8-15.
Así dice el Señor: "En tiempo de gracia te he respondido, en día propicio te he auxiliado; te he defendido y constituido alianza del pueblo, para restaurar el país, para repartir heredades desoladas, para decir a los cautivos: "Salid", a los que están en tinieblas: "Venid a la luz." Aun por los caminos pastarán, tendrán praderas en todas las dunas; no pasarán hambre ni sed, no les hará daño el bochorno ni el sol; porque los conduce el compasivo y los guía a manantiales de agua. Convertiré mis montes en caminos, y mis senderos se nivelarán. Miradlos venir de lejos; miradlos, del norte y del poniente, y los otros del país de Sin. Exulta, cielo; alégrate, tierra; romped a cantar, montañas, porque el Señor consuela a su pueblo y se compadece de los desamparados. Sión decía: "Me ha abandonado el Señor, mi dueño me ha olvidado." ¿Es que puede una madre olvidarse de su criatura, no conmoverse por el hijo de sus entrañas? Pues, aunque ella se olvide, yo no te olvidaré."
SALMO 144.
El Señor es clemente y misericordioso. El Señor es clemente y misericordioso, lento a la cólera y rico en piedad; el Señor es bueno con todos, es cariñoso con todas sus criaturas. R. El Señor es fiel a sus palabras, bondadoso en todas sus acciones. El Señor sostiene a los que van a caer, endereza a los que ya se doblan. R. El Señor es justo en todos sus caminos, es bondadoso en todas sus acciones; cerca está el Señor de los que lo invocan, de los que lo invocan sinceramente. R.
Fray Luis Galindo,O.P.