Papa Francisco pide dejarse sorprender por Jesús “para volver a vivir”
Creado el Domingo, 28 de Marzo del 2021 01:57:42 pm | Modificado el 02/08/2024 10:54:10 am
Durante la homilía celebrada en la misa en el Domingo de Ramos, el papa Francisco invitó a los cristianos a "dejarse sorprender por Jesús para volver a vivir”.
“Dejémonos sorprender por Jesús para volver a vivir porque la grandeza de la vida no está en el tener o en afirmarse, sino en descubrirse amados por Dios. En el Crucificado vemos a Dios humillado, al Omnipotente reducido a un despojo. Y con la gracia del estupor entendemos que, acogiendo a quien es descartado, acercándonos a quien es humillado por la vida, amamos a Jesús. Porque él está en los últimos, en los rechazados, en aquellos que nuestra cultura farisea los condena”, expresó.
El sucesor de Pedro refirió que si la fe pierde su capacidad de sorprenderse se queda sorda, no siente la maravilla de la gracia, ni experimenta el gusto del pan de vida y de la palabra, y no percibe la belleza de los hermanos y el don de la creación.
“Pidamos la gracia del estupor, la vida cristiana sin asombro es monótona, ¿cómo se puede testimoniar la alegría de haber encontrado a Jesús, si no nos dejamos sorprende por su amor admirable que nos perdona y nos hace comenzar de nuevo?”, manifestó.
El pontífice también dijo que Jesús subió a la cruz para descender a nuestro sufrimiento, “probó nuestros peores estados de ánimo: el fracaso, el rechazo de todos, la traición de quien le quiere e, incluso, el abandono de Dios”.
“El Señor se humilló por nosotros para tocar lo más íntimo de nuestra realidad humana, para experimentar toda nuestra existencia, todo nuestro mal, para acércanos y dejarnos solos en el dolor y la muerte, para recuperarnos, para salvarnos”, explicó Francisco.
Jesús “experimentó en su propia carne nuestras contradicciones más dolorosas y así las redimió y las transformó. Su amor se acerca a nuestra fragilidad, llega hasta donde nosotros sentimos más vergüenza. Y ahora sabemos que no estamos solos. Dios está con nosotros en cada herida, en cada miedo. Ningún mal, ningún pecado tiene la última palabra. Dios vence, pero la palma de la victoria pasa por el madero de la cruz. Por eso las palmas y la cruz están juntas”, aseguró.
El obispo de Roma concluyó su homilía refiriéndose a la escena “más hermosa” del estupor que el evangelio de hoy nos muestra: la del centurión que, al ver expirar a Jesús exclama: “¡Realmente este hombre era Hijo de Dios!”. El centurión se dejó asombrar por el amor: vio morir a Jesús “amando” y eso lo asombró. Sufría, estaba agotado, pero seguía amando.
“Esto es el estupor ante Dios, quien sabe llenar de amor incluso el momento de la muerte. En este amor gratuito y sin precedentes, el centurión, un pagano, encuentra a Dios”, finalizó.
El papa Francisco celebró la misa del Domingo de Ramos, que marca la entrada en la Semana Santa, y rezó el Ángelus en presencia de un reducido número de fieles invitados en la Basílica de San Pedro del Vaticano, debido a la pandemia de la covid-19. (L.U. – RSD Noticias).
Foto: AFP.