La Palabra del día 31 de enero del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:27:52 pm
Maestro, ¿no te importa que nos hundamos? Se puso en pie, increpó al viento y dijo al lago: ¡Silencio, cállate! El viento cesó y vino una gran calma. Él les dijo: ¿Por qué sois tan cobardes? ¿Aún no tenéis fe? Se quedaron espantados y se decían unos a otros: ¿Pero quién es éste? ¡Hasta el viento y las aguas le obedecen!REFLEXIÓN.
Dios siempre está presente en nuestra vida, aunque a veces nos de la impresión que está dormido.
1. Tempestad. Jesús invitó a sus discípulos a cruzar el mar y a la mitad se alzó una violenta tempestad. Era la situación de la Iglesia en tiempos en que san Marcos escribió su evangelio. Como una pequeña barquita, la Iglesia experimento fuertes tormentas en del mar del mundo, los discípulos estaban siendo perseguidos, y muchos de ellos habían sido martirizados.
2. Duerme. En esa situación difícil de la primera comunidad, Jesús parecía estar dormido y la amenaza era real, los perseguidores planeaban el exterminio de los cristianos. En estas circunstancias claman a Jesús y él los asiste, los fortalece con su Espíritu y los anima a seguir adelante. Justamente en esos tiempos comienzan a escribirse los libros que harán parte del NT.
- En el mar del mundo, nuestra barca la Iglesia y la barquita de nuestra vida, experimentan tempestades, y en ocasiones sentimos que Jesús duerme. Lo importante no es que duerma o que esté despierto, sino que está presente y por ello nunca nos tenemos que desesperar ante nada. Ten un feliz día.
HEBREOS 11,1-2.8-10.
Hermanos: La fe es seguridad de lo que se espera, y prueba de lo que no se ve. Por su fe, son recordados los antiguos. Por fe, obedeció Abrahán a la llamada y salió hacia la tierra que iba a recibir en heredad. Salió sin saber adónde iba. Por fe, vivió como extranjero en la tierra prometida, habitando en tiendas -y lo mismo Isaac y Jacob, herederos de la misma promesa-, mientras esperaba la ciudad de sólidos cimientos cuyo arquitecto y constructor iba a ser Dios. Por fe, también Sara, cuando ya le había pasado la edad, obtuvo fuerza para fundar un linaje, porque juzgó digno de fe al que se lo prometía. Y así, de uno solo y, en este aspecto, ya extinguido, nacieron hijos numerosos como las estrellas del cielo y como la arena incontable de las playas. Con fe murieron todos éstos, sin haber recibido lo prometido; pero viéndolo y saludándolo de lejos, confesando que eran huéspedes y peregrinos en la tierra. Es claro que los que así hablan están buscando una patria; pues, si añoraban la patria de donde habían salido, estaban a tiempo para volver. Pero ellos ansiaban una patria mejor, la del cielo. Por eso Dios no tiene reparo en llamarse su Dios: porque les tenía preparada una ciudad. Por fe, Abrahán, puesto a prueba, ofreció a Isaac; y era su hijo único lo que ofrecía, el destinatario de la promesa, del cual le había dicho Dios: "Isaac continuará tu descendencia." Pero Abrahán pensó que Dios tiene poder hasta para hacer resucitar muertos. Y así, recobró a Isaac como figura del futuro.
Interleccional: Bendito sea el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado a su pueblo. (Lucas 1). Nos ha suscitado una fuerza de salvación en la casa de David, su siervo, según lo había predicho desde antiguo por boca de sus santos profetas. R. Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian; realizando la misericordia que tuvo con nuestros padres, recordando su santa alianza. R. Y el juramento que juró a nuestro padre Abrahán. Para concedernos que, libres de temor, arrancados de la mano de los enemigos, le sirvamos con santidad y justicia, en su presencia, todos nuestros días. R.
SAN JUAN BOSCO, FUNDADOR DE LOS SALESIANOS. Nació en 1815 en Piamonte (Italia). A los 17 años, ingresó en el seminario de Chieri y era tan pobre, que debía mendigar para reunir el dinero y los vestidos indispensables. Después de recibir el diaconado, pasó al seminario mayor de Turín y empezó, con la aprobación de sus superiores, a reunir todos los domingos a un grupo de chiquillos abandonados de la ciudad en una especie de escuela y lugar de recreo al que llamó Oratorio Festivo. El primer puesto que ocupó fue el de capellán auxiliar en una casa de refugio para muchachas, que había fundado la marquesa di Barola. Después, acabó una escuela nocturna, y como el oratorio estaba lleno, abrió otros dos centros en otros barrios de Turín. En la misma época, empezó a alojar a los niños abandonados. Al poco tiempo, había ya 40 chicos, la mayoría aprendices, que vivían con Don Bosco y su madre en el barrio de Valdocco. Cayó en la cuenta que el bien que hacía por sus chicos, se perdía con las malas influencias del exterior, y decidió construir sus talleres de aprendizaje. Los dos primeros inaugurados en 1853. En 1856, había 150 internos, cuatro talleres, una imprenta, cuatro clases de latín y diez sacerdotes. Los externos eran 500. En diciembre de 1859, con sus 22 compañeros decidieron organizar la congregación, cuyas reglas habían sido aprobadas por Pío IX. Pero la aprobación definitiva se dio 15 años después. La orden creció rápidamente: en 1863 habían 39 salesianos, a su muerte eran 768. El siguiente paso fue la fundación de una congregación femenina, quedó inaugurada en 1872, con la toma del hábito de 27 jóvenes a las que el santo llamó Hijas de Nuestra Señora, Auxilio de los Cristianos. Don Bosco realizó uno de sus sueños al enviar sus primeros misioneros a la Patagonia. Poco a poco los salesianos se extendieron por América del Sur. Tenían 36 casas en el Nuevo Mundo y 38 en Europa. Las instituciones salesianas en la actualidad comprenden escuelas primaria y segunda enseñanza, seminarios, escuelas para adultos, escuelas técnicas y de agricultura, talleres de imprenta y librería, hospitales, etc. sin omitir las misiones y el trabajo pastoral.
Don Bosco murió el 31 de enero de 1888. Su canonización tuvo lugar en 1934.
Fray Luis Galindo,O.P.