La Palabra del día 27 de agosto del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:28:20 pm
y cuidadoso, a quien el amo encarga de dar a la servidumbre la comida a sus horas? Pues dichosos ese criado si el amo, al llegar, lo encuentra portándose así. Os aseguro que le confiará la administración de todos sus bienes. Pero si el criado es un canalla y, pensando que su amo tardará, empieza a pegar a sus compañeros y a comer y a beber con los borrachos, el día y la hora que menos se lo espera llegará el amo y lo hará pedazos, como se merecen los hipócritas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.Reflexión. El texto es parte del quinto y último sermón de Jesús en san Mateo, llamado “discurso escatológico”, porque trata de las realidades finales de la vida del discípulo.
1. En vela. El cristiano de verdad no se preocupa por el fin del mundo, el juicio final, ni por la muerte, realidades que asustan a los sin fe o de poca fe. Al creyente le basta estar en vela, es decir, siempre preparado para el momento que el Señor le llame. Lleva una vida diaria de oración, acude el domingo a la mesa eucarística, oye con atención la Palabra y se esfuerza por realizar bien la vocación y el servicio que el Señor le ha encomendado.
2. Criado fiel. El buen cristiano es como el criado fiel, su vida la ha recibido como un don para hacer todo el bien posible a las personas con las que vive y a la sociedad. Ha descubierto que el sentido de su vida es ser un cuidadoso servidor de su Señor, en el estado de vida en que se encuentre. Naturalmente Dios estará contento con él y le colmará de bendiciones y le añadirá responsabilidades. Los santos son el ideal de criado fiel.
- Esforcémonos por ser el siervo fiel del Señor, Él continuamente viene a nosotros en la Eucaristía, en su Palabra, en nuestros hermanos y en todos los acontecimientos de la vida. Ten un feliz día.
Primera Lectura: 1 Tesalonicenses 3,7-13. Hermanos, en medio de todos nuestros aprietos y luchas, vosotros, con vuestra fe, nos animáis; ahora nos sentimos vivir, sabiendo que os mantenéis fieles al Señor. ¿Cómo podremos agradecérselo bastante a Dios? ¡Tanta alegría como gozamos delante de Dios por causa vuestra, cuando pedimos día y noche veros cara a cara y remediar las deficiencias de vuestra fe! Que Dios, nuestro Padre, y nuestro Señor Jesús nos allanen el camino para ir a veros. Que el Señor os colme y os haga rebosar de amor mutuo y de amor a todos, lo mismo que nosotros os amamos. Y que así os fortalezca internamente, para que, cuando Jesús, nuestro Señor, vuelva acompañado de todos sus santos, os presentéis santos e irreprensibles ante Dios, nuestro Padre.
Salmo Responsorial: 89. Sácianos de tu misericordia, Señor, y estaremos alegres. Tú reduces al hombre a polvo, diciendo: "Retornad, hijos de Adán." Mil años en tu presencia son un ayer, que pasó; una vela nocturna. R. Enséñanos a calcular nuestros años, para que adquiramos un corazón sensato. Vuélvete, Señor, ¿hasta cuándo? Ten compasión de tus siervos. R. Por la mañana sácianos de tu misericordia, y toda nuestra vida será alegría y júbilo. Baje a nosotros la bondad del Señor y haga prósperas las obras de nuestras manos. R.
Fray Luis Galindo,O.P.