La Palabra del día 22 de marzo del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:27:59 pm
y Andrés y Felipe fueron a decírselo a Jesús. Jesús les contestó: Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre. Os aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que se ama a sí mismo se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo se guardará para la vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo premiará. Ahora mi alma está agitada, y ¿qué diré?: Padre, líbrame de esta hora. Pero si por esto he venido, para esta hora. Padre, glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: Lo he glorificado y volveré a glorificarlo. La gente que estaba allí y lo oyó decía que había sido un trueno; otros decían que le había hablado un ángel. Jesús tomó la palabra y dijo: Esta voz no ha venido por mí, sino por vosotros. Ahora va a ser juzgado el mundo; ahora el Príncipe de este mundo va a ser echado fuera. Y cuando yo sea elevado sobre la tierra atraeré a todos hacia mí. Esto lo decía dando a entender la muerte de que iba a morir.REFLEXIÓN.
Hemos llegado ya casi al final de nuestro camino cuaresmal, el siguiente domingo comienza la Semana Santa, con el Domingo de Ramos. Jesús habla hoy de la llegada de su Hora y de su Glorificación.
1. Cuaresma. Después del miércoles de ceniza, en éste tiempo hacemos seis pasos, donde Dios nos invita: a la conversión, a la escucha de Jesús, a la purificación de nuestro santuario interior, a agradecer su amor gratuito, y hoy, a vivir el proceso de muerte al hombre viejo para resucitar al hombre nuevo.
2. Deseo de ver. En los griegos que se acercan a los apóstoles con el deseo de ver a Jesús, estamos representados los creyentes del mundo no judío. Jesús responde a la petición diciendo que ya llegó la Hora en que será glorificado, es decir, será crucificado y será resucitado. Así será visto el Señor en adelante.
3. Grano de trigo. Ésta es una imagen extraordinaria que Jesús utiliza para expresar el paso que va a realizar. El grano de trigo muere de dos formas, al ser sembrado, para dar más fruto, y al ser tostado y molido para ser pan. Jesús como el trigo muere para resucitar a una vida nueva, y para ser Pan de vida para el que cree en él.
- Al estar cerca ya de las celebraciones de los misterios centrales de nuestra fe, sigamos intensificando nuestra preparación espiritual para que en nosotros muera lo que nos separa del Señor y renazca todo lo que nos asemeja a él y nos hace otro Cristo. Feliz domingo.
JEREMÍAS 31,31-34.
“Mirad que llegan días -oráculo del Señor- en que haré con la casa de Israel y la casa de Judá una alianza nueva. No como la alianza que hice con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos de Egipto: ellos quebrantaron mi alianza, aunque yo era su Señor -oráculo del Señor-. Sino que así será la alianza que haré con ellos, después de aquellos días -oráculo del Señor-: Meteré mi ley en su pecho, la escribiré en sus corazones; yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y no tendrá que enseñar uno a su prójimo, el otro a su hermano, diciendo: Reconoce al Señor. Porque todos me conocerán, desde el pequeño al grande -oráculo del Señor-, cuando perdone sus crímenes y no recuerde sus pecados.”
SAL 50. OH DIOS, CREA EN MÍ UN CORAZÓN PURO.
Misericordia, Dios mío, por tu bondad, por tu inmensa compasión borra mi culpa; lava del todo mi delito, limpia mi pecado. R. Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con espíritu firme; no me arrojes lejos de tu rostro, no me quites tu santo espíritu. R. Devuélveme la alegría de tu salvación, afiánzame con espíritu generoso: enseñaré a los malvados tus caminos, los pecadores volverán a ti. R.
HEBREOS 5,7-9.
Cristo, en los días de su vida mortal, a gritos y con lágrimas, presentó oraciones y súplicas al que podía salvarlo de la muerte, cuando es su angustia fue escuchado. Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a obedecer. Y, llevado a la consumación, se ha convertido para todos los que le obedecen en autor de salvación eterna.
Fray Luis Galindo,O.P.