La Palabra del día 04 de febrero del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:27:54 pm
hermano de Santiago y José y Judas y Simón? Y sus hermanas ¿no viven con nosotros aquí? Y esto les resultaba escandaloso. Jesús les decía: No desprecian a un profeta más que en su tierra, entre sus parientes y en su casa. No pudo hacer allí ningún milagro, sólo curó algunos enfermos imponiéndoles las manos. Y se extrañó de su falta de fe. Y recorría los pueblos de alrededor enseñando.REFLEXIÓN.
Los evangelios presentan extraordinarios ejemplos de fe en Jesús, pero también la incredulidad y la indiferencia de muchos a sus enseñanzas y a su persona.
1. Fue a su pueblo. Jesús después de iniciar su misión con obras y enseñanzas nuevas va a su pueblo. Al entrar en la sinagoga seguro que encuentra a muchos conocidos que le han visto crecer, trabajar, que fue su vecino, etc. Pero ante sus milagros y enseñanzas sus paisanos son escépticos, no le acogen y recalcan conocerle bien.
2. No pudo hacer milagro. Como Dios Jesús podía haber hecho milagros para hacerles creer, pero respeta la libertad de la gente de su pueblo y no los fuerza. Dios es todopoderoso, pero no entra en la vida de las personas sin que éstas se lo permitan. Para actuar Dios necesita la apertura, el consentimiento y la libertad del hombre.
- Los que estamos en contacto diario con el Señor necesitamos mente y corazón abiertos para seguir creyendo en él, para experimentar su acción. De lo contrario, nos sucederá lo mismo que a los nazaretanos que al pensar que le conocen bien, le impiden obrar y enseñar entre ellos. Ten un feliz día.
HEBREOS 12,4-7.11-15. Hermanos: Todavía no habéis llegado a la sangre en vuestra pelea contra el pecado. Habéis olvidado la exhortación paternal que os dieron: "Hijo mío, no rechaces la corrección del Señor, no te enfades por su reprensión; porque el Señor reprende a los que ama y castiga a sus hijos preferidos." Aceptad la corrección, porque Dios os trata como a hijos, pues, ¿qué padre no corrige a sus hijos? Ninguna corrección nos gusta cuando la recibimos, sino que nos duele; pero, después de pasar por ella, nos da como fruto una vida honrada y en paz. Por eso, fortaleced las manos débiles, robusteced las rodillas vacilantes, y caminad por una senda llana: así el pie cojo, en vez de retorcerse, se curará. Buscad la paz con todos y la santificación, sin la cual nadie verá al Señor. Procurad que nadie se quede sin la gracia de Dios y que ninguna raíz amarga rebrote y haga daño, contaminando a muchos.
SALMO 102. La misericordia del Señor dura siempre, para los que cumplen sus mandatos. Bendice, alma mía, al Señor, y todo mi ser a su santo nombre. Bendice, alma mía, al Señor, y no olvides sus beneficios. R. Como un padre siente ternura por sus hijos, siente el Señor ternura por sus fieles; porque él conoce nuestra masa, se acuerda de que somos barro. R. Pero la misericordia del Señor dura siempre, su justicia pasa de hijos a nietos: para los que guardan la alianza. R.
Fray Luis Galindo,O.P.