La Palabra del día 03 de enero del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:27:49 pm
Y Juan dio testimonio diciendo: He contemplado al Espíritu que bajaba del cielo como una paloma, y se posó sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: “Aquél sobre quien veas bajar el Espíritu y posarse sobre él, ése es el que ha de bautizar con Espíritu Santo.” Y yo lo he visto, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.REFLEXIÓN.
Jesús es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
1. Al día siguiente. En Juan 1,19-51 encontramos la semana inaugural del ministerio de Jesús. La creación en Génesis 1 está relatada en una semana; en este texto de Juan podríamos ver el inicio de la nueva creación realizada por Jesús, también en una semana. Cada libro de la Biblia tiene relación con todos, de modo especial encontramos puntos de contacto entre el evangelio de san Juan y el libro del Génesis.
2. Segundo día. El día al que se refiere san Juan en el texto de hoy, corresponde al segundo día. En él Juan Bautista ahonda en su testimonio sobre Jesús, lo presenta como Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. El sacrificio del cordero expiatorio en el AT, era el medio para implorar de Dios el perdón. Desde que Jesús murió en la cruz, no necesitamos ese ritual, porque él murió para obtenernos de Dios el perdón.
3. El Espíritu Santo bajó sobre él. Juan confiesa a Jesús como el que tiene la plenitud del Espíritu Santo. Según los evangelios sinópticos, Jesús está totalmente revestido por el Espíritu de Dios, fue concebido por él, lo llevó al desierto, le hizo iniciar su misión en la sinagoga de Nazaret, mueve toda su vida y misión. Jesús es Dios, es el Hijo que está en eterna comunión con el Padre y el Espíritu Santo.
- Que nuestra relación de amistad, de amor y de fe con Jesús, el Cordero de Dios, sea un continuo proceso de recreación y renovación. Ten un feliz día.
1JUAN 2,29-3,6. Queridos hermanos: Si sabéis que él es justo, reconoced que todo el que obra la justicia ha nacido de él. Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no le conoció a él. Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es. Todo el que tiene esperanza en él se purifica a sí mismo, como él es puro. Todo el que comete pecado quebranta también la ley, pues el pecado es quebrantamiento de la ley. Y sabéis que él se manifestó para quitar los pecados, y en él no hay pecado. Todo el que permanece en él no peca. Todo el que peca no le ha visto ni conocido.
SALMO 97. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera; gritad, vitoread, tocad. R. Tañed la citara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas, aclamad al Rey y Señor. R.
Fray Luis Galindo,O.P.