Creado el Miércoles, 1 de Septiembre del 2021 09:04:57 am | Modificado el 06/10/2021 01:38:36 pm

En este tiempo de pandemia, se debe hacer una planeación estratégica muy distinta a como se estaba acostumbrado a realizar anteriormente, señala el doctor Felipe Llenque Tume*

Lo complicado que es hacer, en estos tiempos, planes estratégicos. Sin embargo, a pesar de los entornos turbulentos por la que pasan los negocios actualmente, existe necesidad de seguir visualizando el futuro que se torna en presente en tiempos más cortos. Para ello, se debe hacer una planeación estratégica muy distinta a como se estaba acostumbrado a realizar anteriormente

Delta Asesores, en su artículo Estrategias Innovadoras, indica lo siguiente: El agitado mundo de los negocios de hoy, hace indispensable dedicarnos un poco más al proceso de generar innovación, a ver que “nuevo” o “novedoso” se nos puede ocurrir de tal manera que podamos ser percibidos como distintos a los demás pero que realmente resuelva o llene un vacío (agregue valor) en las necesidades de nuestros clientes potenciales.

Es difícil usar métodos tradicionales para identificar necesidades que, en la mayoría de las situaciones, el futuro cliente ni siquiera sabe que las tiene. De nada sirven los grupos de enfoque, las encuestas, y demás métodos que tradicionalmente utilizamos en mercadeo para determinar y tomar decisiones sobre productos o sus variantes.

Hoy hay un sinnúmero de tecnologías, de fácil acceso e inclusive gratuitas, que le permitirán fácilmente generar atención a necesidades, existentes ya o inclusive creadas, de una manera rápida y efectiva. Sin embargo, estas tecnologías no se van a aplicar solas, y si se aplican, no funcionan desatendidas.

Se requiere la construcción entonces de estrategias que incorporen las redes sociales, el posicionamiento geográfico, la telefonía inteligente y el acceso móvil a internet, las tabletas, los medios por dispositivos distintos al televisor y la radio, la internacionalización, los mapas, las traducciones automáticas en tiempo real.

Es, en estos tiempos donde se hace imprescindible utilizar la estrategia del océano azul. Esta estrategia es un cambio de paradigma en la manera en que se hacen los negocios, ya que propone encontrar nuevos nichos de mercado en aquellos espacios que todavía no han sido explorados por el comercio. Esos espacios son los llamados océanos azules.

Tenga en cuenta, sin embargo, que esta ventaja es efímera, dura muy poco, lo suficiente para obtener unos buenos beneficios, pero no tanto como para dormirse en sus laureles. El proceso de innovación, búsqueda de nuevas alternativas, creación de esas necesidades, debe ser permanente, e incorporado en todas las instancias de su negocio, como una estrategia de la compañía.

* Felipe Llenque Tume es doctor en Administración, past decano del Colegio Regional de Licenciados en Administración (Corlad Chimbote), director de la Escuela de Administración en la Uladech Católica, consultor en capacitación y asesoría empresarial a sectores económicos de producción y servicios, y miembro del Directorio de Sedachimbote.

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