LA COLUMNA DEL DÍA: cuando se trabaja en equipo
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:30:19 pm
Cuatro amigos universitarios se fueron de juerga un fin de semana antes de los exámenes finales, los mismos que se llevarían a cabo a inicio de la semana. La pasaron “bomba”, como es natural, hubo baile y muchos tragos; después de tanta fiesta, durmieron la mona todo el domingo y no volvieron a casa hasta el lunes por la mañana. Como no habían podido estudiar, en lugar de entrar al examen final, decidieron que al terminar el examen hablarían con el profesor y le explicarían la razón por la cual no habían acudido. Estaban muy seguros que el profesor les aceptaría su excusa.
Así fue, los cuatro jóvenes universitarios le explicaron al profesor que se habían ido de viaje el último fin de semana y planeaban regresar para estudiar, pero desafortunadamente una de las llantas del carro reventó. No tenían herramientas y nadie les había querido ayudar... Como resultado de la aventura, no llegaron a tiempo al examen final.
El profesor se quedó pensando durante un buen rato y acordó tomarles el examen final al día siguiente. Los cuatro amigos estaban muy contentos. Estudiaron toda la noche y se presentaron al examen a la mañana siguiente. El profesor les puso en aulas separadas y les entregó a cada uno de ellos la hoja del examen.
El examen final consistía en resolver dos problemas.
Escribieron sus datos y leyeron el primer problema, valía 8 puntos y era muy fácil.
- ¡Recórcholis! —Pensó cada uno de ellos en su respectiva aula—. ¡Esto está fácil!
Cada uno resolvió el problema y voltearon la hoja del examen.
En la segunda página estaba la otra pregunta que valía 12 puntos:
La pregunta decía lo siguiente:
- ¿Qué llanta del carro exactamente fue la que reventó?
Como es natural, las respuestas de los jóvenes fueron distintas, por lo que desaprobaron el curso.
Si bien es cierto, esto es una simple anécdota, la verdad es que para trabajar en equipo, no se logra de un día para otro. El trabajo en equipo es todo un proceso de aprendizaje que implica el involucramiento del personal de una organización dirigidos eficientemente por su líder.
Una norma básica para cualquier equipo de trabajo mínimamente eficiente, es coordinar adecuadamente y comunicarse eficazmente ya que, en caso contrario, se pueden encontrar en situaciones como la del relato. En estos casos se debería que recordar que hay tres cosas que nunca vuelven atrás: la palabra pronunciada, la flecha lanzada y la oportunidad perdida.
*Felipe Llenque Tume - Pastdecano del Colegio de Licenciados en Administración (CORLAD Chimbote).
Ilustración: internet
Las opiniones contenidas en los artículos publicados en la sección “LA COLUMNA DEL DÍA” son de estricta responsabilidad de sus autores.