Chimbote: jóvenes se organizan para alimentar a cientos de pelícanos hambrientos
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:33:30 pm
Este es el caso de un grupo de jóvenes que, desde hace cuatro días, lleva alimento a los pelícanos que se agolpan en el muelle artesanal y en las afueras del mercado Alfonso Ugarte.
Sus cuatro jornadas están registradas en la cuenta de Facebook de uno de ellos, Julio Balta. Con su propio peculio, los jóvenes compran pescado y vísceras que luego dan a comer todos los pelícanos que puedan. Ellos son testigos de que muchas de estas aves se encuentran en condición precaria debido a la falta de alimento, por eso piden apoyo a sus contactos de la red social.
“Si desean seguir apoyando, no lo duden. Seguiré yendo todos los días que pueda (aunque sea solo) a las 8 de la mañana al mercado de peces y al muelle de La Caleta (frente al hospital)”, escribió Julio Balta, quien dejó dos números de contacto: el nextel 134*2426 y el celular 981342426.
Otra acción similar digna de resaltar es la que protagonizaron alumnos, docentes y trabajadores de la Universidad San Pedro quienes, por varios días, también llevaron pescado a los pelícanos que se concentran en otros puntos de Chimbote: mercado Dos de Mayo, mercado La Perla, parte exterior del colegio Víctor Andrés Belaúnde, etc.
Hace poco más de una semana la Gerencia de Salud y Medioambiente de la Municipalidad Provincial del Santa inició una campaña para alimentar a los pelícanos: instaló una carpa en la Plaza de Armas con la finalidad de recibir donaciones de pescado. Aunque parezca increíble, en una ciudad pesquera como Chimbote las empresas de ese rubro brillan por su ausencia. Quienes donan desinteresadamente son ciudadanos de a pie.
Hasta el momento los esfuerzos son aislados y, como se puede notar, no provienen de las autoridades organizadas. Ni siquiera de las empresas pesqueras. Los protagonistas son personas de gran sensibilidad que ven con preocupación la muerte progresiva de los pelícanos, la tercera ave guanera más importante del nuestro país. Las condiciones anómalas del mar vienen jugando en contra de la actividad pesquera: no hay anchoveta para el consumo humano e industrial; tampoco para los llamados “cochos”. (RSD Noticias).