La Palabra del día 18 de mayo del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:28:08 pm
por ello creemos que saliste de Dios.” Les contestó Jesús: “¿Ahora creéis? Pues mirad: está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que os disperséis cada cual por su lado y a mí me dejéis solo. Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo.”Reflexión. El texto de hoy nos trae las últimas palabras de Jesús en la Última Cena a sus discípulos, el cap. 17 es la oración sacerdotal de Jesús.
1. Comprensión. Los discípulos dicen que ahora comprenden. Es verdad, han llegado a entender bastante del misterio de Jesús, pero aún les falta mucho. Ésta será la tarea del Espíritu Santo que recibirán en Pentecostés. El Espíritu terminará la formación del Apóstol y les capacitará para su misión.
2. Abandono y compañía. Jesús predice la cobardía de sus Apóstoles: le traicionarán, negarán y abandonarán. Pero él les perdonará, después de su resurrección los buscará. Él nunca quedará sólo, el Padre estará con él. Esto prometió siempre Dios a sus elegidos en el AT, por ejemplo a Moisés, Jeremías, etc.
3. Luchas. Jesús anuncia a sus discípulos las luchas que enfrentarán. Lo constatamos en el libro de los Hechos. Pero les asegura su ayuda y su asistencia mediante el Espíritu Santo, por eso les dice “¡Ánimo, yo he vencido al mundo!” Así como contó con la ayuda de su Padre, así ellos contarán con la suya.
- En esta semana imploremos de Dios una nueva efusión del Espíritu Santo en Pentecostés. Necesitamos comprender mejor los misterios de nuestra fe; necesitamos fuerza para enfrentar a diario las luchas de nuestra vida. Ten un feliz día.
Primera lectura: Hechos 19,1-8. Mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó la meseta y llegó a Éfeso. Allí encontró unos discípulos y les preguntó: "¿Recibisteis el Espíritu Santo al aceptar la fe?" Contestaron: "Ni siquiera hemos oído hablar de un Espíritu Santo." Pablo les volvió a preguntar: "Entonces, ¿qué bautismo habéis recibido?" Respondieron: "El bautismo de Juan." Pablo les dijo: "El bautismo de Juan era signo de conversión, y él decía al pueblo que creyesen en el que iba a venir después, es decir, en Jesús." Al oír esto, se bautizaron en el nombre del Señor Jesús; cuando Pablo les impuso las manos, bajó sobre ellos el Espíritu Santo, y se pusieron a hablar en lenguas y a profetizar. Eran en total unos doce hombres. Pablo fue a la sinagoga y durante tres meses habló en público del reino de Dios, tratando de persuadirlos.
Salmo 67. Reyes de la tierra, cantad a Dios. Se levanta Dios, y se dispersan sus enemigos, huyen de su presencia los que lo odian; como el humo se disipa, se disipan ellos; como se derrite la cera ante el fuego, así perecen los impíos ante Dios. R. En cambio, los justos se alegran, gozan en la presencia de Dios, rebosando de alegría. Cantad a Dios, tocad en su honor, su nombre es el Señor. R. Padre de huérfanos, protector de viudas, Dios vive en su santa morada. Dios prepara casa a los desvalidos, libera a los cautivos y los enriquece. R
Fray Luis Galindo,O.P.