La Palabra del día 15 de junio del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:28:11 pm
al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también la capa; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñale dos; a quien te pide, dale, y al que te pide prestado, no lo rehuyas.”Reflexión. Seguimos meditando el Sermón del monte de Jesús. Esta vez nos enseña cómo hacer frente a la violencia y cómo cortar su espiral.
1. Ojo por ojo. Paradójicamente la ley del talión tenía la finalidad de frenar la violencia y cuidar de la vida humana, en una sociedad tribal primitiva. Sin embargo, Jesús enseña a sus discípulos el método de la no violencia y del pacifismo radical. Ellos estarán movidos y guiados por el Espíritu Santo que les capacitará para ser mansos y pacíficos de corazón.
2. Odio - Amor. Además, Jesús enseña a devolver el bien a quien te hace el mal, en cuatro puntos: si te hacen un mal físico, no se lo hagas tú; si te quieren quitar algo, despréndete de aquello; si te imponen una carga, llévala con gusto; si te piden algo en préstamo, dalo con generosidad. Pero, Jesús no enseña la pasividad, ni el masoquismo. El amor a Dios implica, también, hacer respetar la propia dignidad y el valor. Para realizar estas enseñanzas necesitamos la inteligencia y la sabiduría del Espíritu Santo.
- Busquemos siempre el bien de los demás, nunca les devolvamos mal por mal, quien te hizo un mal, pero se hizo a sí mismo, por eso, oremos por ellos y pongamos siempre nuestro caso en manos del Juez justo. Ten un feliz día.
Primera lectura: 2 Corintios 6,1-10. Hermanos: Secundando su obra, os exhortamos a no echar en saco roto la gracia de Dios, porque él dice: "En tiempo favorable te escuché, en día de salvación vine en tu ayuda"; pues mirad, ahora es tiempo favorable, ahora es día de salvación. Para no poner en ridículo nuestro ministerio, nunca damos a nadie motivo de escándalo; al contrario, continuamente damos prueba de que somos ministros de Dios con lo mucho que pasamos: luchas, infortunios, apuros, golpes, cárceles, motines, fatigas, noches sin dormir y días sin comer; procedemos con limpieza, saber, paciencia y amabilidad, con dones del Espíritu y amor sincero, llevando la palabra de la verdad y la fuerza de Dios. Con la derecha y con la izquierda empuñamos las armas de la justicia, a través de honra y afrenta, de mala y buena fama. Somos los impostores que dicen la verdad, los desconocidos conocidos de sobra, los moribundos que están bien vivos, los penados nunca ajusticiados, los afligidos siempre alegres, los pobretones que enriquecen a muchos, los necesitados que todo lo poseen.
Salmo 97. El Señor da a conocer su victoria. Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R. El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclamad al Señor, tierra entera; gritad, vitoread, tocad. R.
Fray Luis Galindo,O.P.