La Palabra del día 11 de abril del 2015
Creado el Miércoles, 10 de Febrero del 2016 11:28:06 pm
que procede del Padre, él dará testimonio de mí; y también vosotros daréis testimonio, porque desde el principio estáis conmigo. Os he hablado de esto, para que no tambaleéis. Os excomulgarán de la sinagoga; más aún, llegará incluso una hora cuando el que os dé muerte pensará que da culto a Dios. Y esto lo harán porque no han conocido ni al Padre ni a mí. Os he hablado de esto para que, cuando llegue la hora, os acordéis de que yo os lo había dicho.”REFLEXIÓN.
En los capítulos 14-16 del evangelio de san Juan, Jesús habla con frecuencia de lo que será la acción del Espíritu en la vida de los discípulos después de la Resurrección.
1. Testimonio del Espíritu Santo. Los Apóstoles compartieron la vida con Jesús, por más o menos tres años, pero no comprendieron plenamente ni su vida, ni su enseñanza. El Espíritu Santo en Pentecostés les infundió una luz especial. Allí comenzaron a caer en la cuenta de la verdad del ser y misión de su Maestro.
2. Testimonio de los discípulos. Una vez recibida esa comprensión, los discípulos con la fortaleza, la inteligencia y la sabiduría del Espíritu Santo, salieron al mundo a testimoniar su experiencia de Jesús. Proclamaron que es el Cristo, el Hijo de Dios y que es Dios uno con el Padre y el Espíritu Santo.
3. La persecución. Jesús advirtió a los discípulos de las persecuciones que sufrirían por su causa. Sus hermanos los judíos los expulsaron de las sinagogas, los romanos les prohibieron confesar y celebrar su fe. Pero en medio de esa situación se mantuvieron firmes, el Espíritu Defensor, estaba con ellos.
- Los cristianos de hoy necesitamos igualmente al Espíritu Santo, para testimoniar nuestra fe en Jesús. Sin su ayuda no podremos realizar ninguna de las tareas que el Señor nos ha encomendado. Ten un feliz día.
PRIMERA LECTURA: HECHOS 16,11-15.
En aquellos días, zarpamos de Troas rumbo a Samotracia; al día siguiente salimos para Neápolis y de allí para Filipos, colonia romana, capital del distrito de Macedonia. Allí nos detuvimos unos días. El sábado salimos de la ciudad y fuimos por la orilla del río a un sitio donde pensábamos que se reunían para orar; nos sentamos y trabamos conversación con las mujeres que habían acudido. Una de ellas, que se llamaba Lidia, natural de Tiatira, vendedora de púrpura, que adoraba al verdadero Dios, estaba escuchando; y el Señor le abrió el corazón para que aceptara lo que decía Pablo. Se bautizó con toda su familia y nos invitó: "Si estáis convencidos de que creo en el Señor, venid a hospedaros en mi casa." Y nos obligó a aceptar.
SALMO 149.
El Señor ama a su pueblo. Cantad al Señor un cántico nuevo, resuene su alabanza en la asamblea de los fieles; que se alegre Israel por su Creador, los hijos de Sión por su Rey. R. Alabad su nombre con danzas, cantadle con tambores y cítaras; porque el Señor ama a su pueblo y adorna con la victoria a los humildes. R. Que los fieles festejen su gloria y canten jubilosos en filas, con vítores a Dios en la boca; es un honor para todos sus fieles. R.
Fray Luis Galindo,O.P.